Solita y sola...

Lo bueno de una relacion a larga distancia es que cuando se termina, uno no tiene que empezar de nuevo a reencontrarse con los amigos que ha descuidado porque uno estaba en pareja, ni tiene que ponerse al dia con ellos, no tiene que actualizarse con las movidas nocturnas, ni lugares "in"... teniendo una relacion a larga distancia uno proseguia con su vida normalmente, como si estuviera sola, pero sabiendo que no estaba tannnn sola. De tanto en tanto, aparecian encuentros fugaces.
Con lo cual, lo positivo de este final es que uno contina con su vida como la viene llevando, pero abriendo los ojos a las posibilidades, siendo receptiva a las mismas.
Lo malo de una relación que se termina, cualquiera sea su naturaleza es la sensación de pérdida de tiempo y energía... no malinterpretemos. Uno ha dedicado mucho tiempo real y dedicación en conocer a amigos, mamá, papá, hermanos, cuñadas, etc de su novio del momento (del cual uno creia que era el definitivo). Uno se siente nervioso, ansioso ante estas situaciones, las expectativas del estilo "cómo le voy a caer", "que pensará de mi", entre otras cosas... uno pone su mejor cara y predisposición ante suegras jodidas, amigos boludos, cuñadas raras, en fin... es un gasto energético que solo uno lo hace porque tiene la convicción de que ese amor será para toda la vida...
pero cuando te encontrás en el final de una relación, lo segundo que pensás (porque lo primero no nos engañemos es "que boludo, nunca va a encontrar una mina como yo") es "no quiero conocer a nadie mas", "no quiero relacionarme mas con amigos, padres, familias", "mi cuota de vida social esta cubierta". Entonces uno piensa en todas las horas desperdigadas en conocer gente que, en el mejor de los casos, nunca mas va cruzarse en su vida. Y es ese momento en el que uno, solo desea que el proximo sapo tarde en llegar el tiempo suficiente como para recuperarse de la energia quemada...